Hotel
Enclave histórico en el corazón de la Ribera del Duero, construida por el Duque de Lerma como albergue real para el descanso y recreo de caza. Entre sus invitados cabe citar Lope de Vega y Rubens. Posteriormente Felipe IV y Felipe V. El edificio mantiene intacta su estructura exterior que data del siglo XVII. Rodeada esta joya de estilo herreriano de amplios y cuidados jardines que invitan a la reflexión, lectura y descanso, así como pistas deportivas para practicar pádel, tenis o baloncesto. Durante los meses estivales, la piscina ayudará a sobrellevar los calores propios del verano. Sólo 18 habitaciones que invitan al descanso.
En su interior cuenta con amplias zonas comunes de descanso y con conexión wifi. Un servicio de self-service en el Bar/Cafetería para tomar un vino PRADOREY. Un amplio comedor en el que ofrecemos menús caseros y típicos regionales como la degustación de nuestro Menú Castellano con especialidades de la casa.
Junto a la Posada se encuentra una iglesia reconstruida en los años 50 que alberga un magnífico retablo gótico dedicado a San Andrés, obra del anónimo “pintor de Ventosilla”.