Escapada en Aveiro con desayuno, degustación de dulces típicos y Moliceiro

El hotel Veneza es un magnífico hotel-residencia inspirado en los años 30 y ubicado en la maravillosa ciudad de Aveiro, a caballo entre Lisboa y Oporto y reconocida por ser “la Venecia Portuguesa”. Aquí, los colores típicos de los azulejos portugueses, la arquitectura y la tradición hacen mella en este fantástico hotel que cuenta con instalaciones de notable calidad. Así, el Veneza cuenta con 49 habitaciones, repartidas en 4 plantas y equipadas con todo lo necesario para que disfrutes de una estancia ideal, a saber: cuarto de baño privado y completo, aire acondicionado, televisión por cable, WiFi, minibar y teléfono. Asimismo, la decoración y fachada del hotel hacen de este un lugar de tranquilidad y un remanso de paz absolutos. La belleza de sus colores, la combinación perfecta del blancoamarillo de sus líneas y ventanas, así como su cuidado jardín, hace del Veneza Hotel, el lugar ideal para disfrutar de una perfecta estancia en Aveiro. El establecimiento se localiza a tan sólo 100 metros de la estación de tren de la ciudad, de fácil acceso y a pocos minutos a pie del Centro Cultural y de Congresos, de la Universidad de Aveiro y del Centro Comercial Forum. Además, el Veneza también se encuentra cerca de las hermosas playas de Barra y Costa Nova. También te contamos la enorme oferta cultural, histórica y patrimonial que ofrece la conocida como “Venecia de Portugal”, y es que ha sido frecuentemente denominada así por los canales que atraviesan la ciudad los cuales la dotan de una gran belleza. Podrás recorrer estos canales con las embarcaciones típicas, los “Moliceiros”, que surcan las aguas de la ría. También, recomendamos fervientemente la gastronomía portuguesa, pues ésta combinado lo mejor de la tradición culinaria lusa con la más reconocida gastronomía mediterránea. Un sinfín de sabores fundiéndose en tu paladar. No esperes más y disfruta de una desconexión en esta ciudad increíble de la costa portuguesa alojándote en el Veneza Hotel. ¡Vive Aveiro!