Las vacaciones de Navidad están a la vuelta de la esquina, pero no puedes esperar más, ¿verdad? No te aguantes las ganas y escápate este puente de diciembre. Despídete de este otoño en familia, en pareja, en solitario o con los amigos. Elige la compañía, el plan, el destino y ¡prepárate para disfrutar!
¿Playas en otoño?
¿Ya echas de menos el verano? ¿Las bajas temperaturas te tocan la moral? Pues nada, súbete a un avión y tira para Canarias. Si pretendes darte un baño en diciembre sin morirte de frío ni aguantar aglomeraciones, es el destino perfecto. Aunque el invierno esté a punto llegar, las temperaturas medias se sitúan por encima de los 20 grados y apenas hay turistas. Descubre dónde alojarte en Tenerife y sus numerosos planes que disfrutar en cualquier época del año.
Puente de nieve y tapeo
Granada es mágica todo el año, pero ¿cuándo puedes disfrutar a tope de la capital nazarí? Efectivamente, en diciembre. El frío del invierno todavía no ha llegado, aunque el mercurio ha bajado bastante. Lo justo para contemplar la Alhambra desde San Nicolás enmarcada en ese manto blanco que es Sierra Nevada. Nieve que te permitirá esquiar a placer, no sin antes irte de tapas por el Realejo, claro.
Un poquito de turrón
Si el dulce te puede cuando llega la Navidad, ve llenando la tripa con un poco de turrón. Pero no cualquiera, tiene que ser de Jijona. Escápate a la localidad alicantina, famosa en el mundo entero por sus mazapanes y turrones, y descubre cómo se elaboran estos manjares. Visita los obradores y fábricas donde tiene lugar el milagro y llévate a casa un dulce recuerdo (y un trozo de turrón, por supuesto).
Naturaleza y romanticismo
¿Buscas una escapada un pelín más íntima? León es tu destino. En 2018, cuenta con el honor de ser 'capital gastronómica', así que ve preparando un plan para dos que incluya cena romántica. Quien dice cena, dice desayuno, y, por qué no, una ruta por el El Bierzo (preferiblemente por el valle de Las Médulas). Sus poblaciones de pizarra y sus miradores naturales son para enamorarse.
Vino, tapas y paisajes
En La Rioja tienen el remedio definitivo para combatir el frío: una copa de vino y una ración de chuletillas al sarmiento. La combinación es ideal para convencer a la peña para hacer esa quedada que tanto tiempo lleva en lista de espera. El plan es irrechazable: tapeo, buen vino y parajes que son un regalo para los amantes de la fotografía y el paisajismo.
Cultura entre cuevas
Por último, pero no menos importante, tienes las escapadas culturales. Si todavía no conoces Atapuerca, ve reservando alojamiento en Burgos para el puente de diciembre. No te lo pienses: tómate una tapa de mejillones tigre en la Plaza Mayor, visita al Museo de la Evolución Humana y pilla el bus-lanzadera que te lleva directamente al yacimiento. ¡No te pierdas la tierra del Cid!